L’Ou com balla (El huevo que baila)
¿Qué significa este hecho tan peculiar del huevo que salta misteriosamente, entre salpicaduras de agua, claveles blancos y cerezas rojas sobre un pequeño surtidor que tiene fuerza suficiente para elevarlo cada vez que el viento lo derriba?
L’ou com balla, una de las tradiciones más singulares de Barcelona que desde 1637 ha caracterizado la festividad, es una costumbre que consiste en lograr que un huevo baile en los surtidores de claustros, patios y jardines el día de Corpus. Símbolo de la vida que conlleva la primavera, dicha tradición secular se ha mantenido vigente hasta la actualidad.
Este juego de agua, de origen discutido, puede interpretarse de acuerdo con la celebración de la festividad: l’ou com balla representa visualmente la Eucaristía en el día del Corpus. El huevo blanco, como la Sagrada Forma, se eleva sobre las flores del surtidor como si lo hiciera sobre un caliz adornado con cerezas de un rojo rubí.
Una segunda interpretación, ya apuntada, es de orden sencillamente biológico: como anuncio de la plenitud primaveral el huevo representa la eclosión de la fecundidad, de la vida que renace.
